He reducido el mundo a mi jardín y ahora veo la intensidad de todo lo que existe. Ortega y Gasset.







miércoles, 2 de febrero de 2011

Rosa de Jericó


Según cuenta la leyenda, estando Jesús orando por el desierto, una rosa de Jericó le seguía empujada por los vientos y se detenía dulcemente a sus pies. Con la humedad del amanecer, la planta se abría y ofrecía las gotas de rocío que se acumulaban en sus ramitas. Entonces, Jesús las cogía con la yema de sus dedos, se las acercaba a los labios y las utilizaba para calmar su sed. Conmovido, la bendijo.

Ésta y otras leyendas se han extendido a otros pueblos, culturas e incluso continentes con el paso de la civilizaciones, diferentes etnias han considerado la Rosa de Jericó como una Flor Divina, atribuyéndole, de esa forma, algunos poderes beneficiosos y convirtiéndola en un apreciado amuleto utilizado para atraer la paz y la buenaventura al hogar.

La Rosa de Jericó es una planta originaria de los desiertos de Arabia y las inmediaciones del Mar Rojo, así como también está presente en Palestina y Egipto. A diferencia de lo que se cree, no crece de forma nativa en la ciudad de Jericó, así que para discernir el origen del nombre deberemos remontarnos a los antiguos mercados típicos de dicha ciudad israelí, a los que la traían los mercaderes de otros lugares como talismanes muy solicitados.

Cuentos y leyendas aparte, desde tiempos remotos, la Rosa de Jericó se usaba como elemento para adivinar o predecir el clima, ya que al ser un vegetal higrómetro, el sabio o chamán podía pronosticar con acierto las lluvias venideras o las sequias, ya que en tiempo seco, la planta permanece completamente cerrada y, en cambio, en tiempo húmedo, se abre con lentitud, si amenaza lluvia de abre de manera muy vistosa y con más o menos rapidez en función de la proximidad de descarga de las nubes. 

La planta en sí no suele alcanzar más de 15 cm de altura y forma pequeñas flores blancas. Después de la floración, las hojas caen y las ramas se curvan hacia el centro, lo que le confiere una forma casi globosa; en esta fase de su desarrollo es cuando el viento del desierto arrastra la planta que, si cae en el agua, extiende de nuevo las ramas, abre los frutos y dispersa las semillas.

Actualmente, la Rosa de Jericó se ha convertido en un símbolo esotérico, atribuyéndole, así, la capacidad de limpiar las energías negativas aportando la virtud de ayudar a quien la tiene y la cuida, favoreciendo la prosperidad y la felicidad. Su cuidado consiste en ponerle un nombre, ya que se trata de un ser vivo e introducirla en una vasija de cristal llena de agua; durante la primera semana se le renueva el agua día a día para evitar la aparición de moho y algas.

Unos de los primeros textos escritos en relación a la Rosa de Jericó se encuentran en algunos de los pasajes de la Biblia, con más claridad en el Libro Eclesiástico (Elogio a la Sabiduría - Capítulo 24, versículo 14): 24:14 - Crecí como palmera en En-gadi y cual brote de rosa en Jericó; como magnífico olivo en la llanura, y crecí como el plátano... pero en lo que a la literatura moderna se refiere, hay bastantes libros y novelas cuyo título hace referencia al nombre de la planta, por ejemplo el de Francisco Martos, que hace referencia al mágico encuentro entre el chamán Kildo y Evlex, la primera Rosa de Jericó; aunque personalmente  me gustaría proponeros la lectura de la novela, con el mismo título, de la escritora uruguaya Claudia Amengual, en la que nos expone el viaje de una mujer a través de su vida, en el que aprende a mirar hacia dentro y a descubrirse con ojos nuevos, aceptándose tal cual es, sin resistirse al cambio. Es una apuesta a la felicidad no como un estado perpetuo e idílico, sino como una sucesión de buenos y malos momentos vividos con plenitud.
  

Por último, y a modo de conclusión, os invito a adquirir una pequeña Rosa de Jericó, cuidarla, quererla y experimentar sus múltiples cualidades por vosotros mismos.


6 comentarios:

  1. P.D.: Gracias a Anna por animarme a descubrir el mágico mundo de la Rosa de Jericó, ya que fue ella la que me incitó a comprarmela.
    Una y mil veces, gracias.

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  2. Què interessant referència a la rosa del desert, increïble que a partir d' aquella boleta de fulLes seques, esdevingui una planta ufanosa i verda... M'agrada la història que escrius i la part màgica d' aquesta flor... Prenc nota del llibre per llegir-me´l... X molts "escrits" més X SALUT!

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  3. Moltíssimes gràcies Assumpcióm pels ànims, però aquest blog també és vostre, així que us animo a tots i totes a compartir, també, les vostre opinions i experiències. Ben aviat el proper escrit!

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  4. Guapa!!! Per fi et llegeixo! Si és que realment sembla màgica!!! Hi ha una flor, l'ibiscu, que la planta en si té una llarga durada, però la flor no dura més de tres dies. A veure si més sovint entro al blog i et visito, eh! Muaks cuca!

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